En City Bell no hay momento ni lugar para relajarse, porque los delincuentes están a la hora del día. Como hemos contado desde NexoNorte, los autos estacionados volvieron a estar en la mira por los roba ruedas. Pero ahora también, por aquellos que rompen los cristales de los rodados para llevarse lo que haya en el interior.

Prueba de ello, el episodio ocurrido el pasado sábado 5 en Calle 472 y 13 C, cuando un vecino dejó estacionada su camioneta Amarok negra y al volver notó algo sumamente extraño: una luz interior estaba encendida.

Al acercarse al vehículo, confirmó lo peor: había sido víctima de un robo. Inmediatamente, también notó que el vidrio trasero del lado derecho de su camioneta estaba roto y que le faltaba un bolso deportivo de color gris. ¿Lo peor de todo? En su interior había 500 mil pesos, prendas de vestir y zapatillas. 

Teniendo en cuenta el dinero en efectivo y la vestimenta, se calcula que la víctima perdió una suma cercana a los $800.000. Además, el maleante también se llevó el registro de conducir, la cédula del rodado y varias tarjetas bancarias del damnificado. 

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