Los reclamos desde El Rincón no aflojan. Vecinos de la zona comprendida entre Calle 438 y 433, y de Calle 137 a 141, advierten que el estado de los caminos llegó a un punto crítico: pozos, barro, desagües colapsados y accesos prácticamente intransitables que se agravan por el constante paso de camiones de obra que circulan sin control.

La falta de mantenimiento de la Municipalidad de La Plata, sumada al avance de desarrollos privados que utilizan las calles locales como corredores de carga, generó un escenario de deterioro permanente en el barrio ubicado entre City Bell y Villa Elisa.

El Rincón: Un barrio con un único acceso funcional

Hoy El Rincón depende casi exclusivamente de Calle 438 para entrar o salir del barrio. Ese tramo es el único asfaltado y conduce a una enorme cantidad de servicios y establecimientos:

• Haras El Firmamento.

• Colegio de Abogados.

• Colegio Patris.

• Aldea San Efrén.

Claro está, una sola vía asfaltada no alcanza para un barrio que creció de manera explosiva en los últimos años. Con los accesos a Calle 446 cerrados o inutilizables, todo el tránsito se concentra en Calle 438, lo que no solo genera embotellamientos sino un rápido desgaste del pavimento y de las calles de tierra que derivan de ella.

Calles detonadas y pozos imposibles en El Rincón

Como ya informamos desde NexoNorte con anterioridad, los vecinos describen la vida diaria como un desafío constante. En varias cuadras, la situación es crítica:

• Calles con barros permanentes durante días después de la lluvia.

• Zanjas desbordadas.

• Pozos que obligan a maniobras arriesgadas.

• Vehículos dañados y autos que quedan encajados.

• Ambulancias y patrulleros que demoran en ingresar.

• Camiones de obra que rompen aún más las calles.

• En varios sectores, literalmente no se puede transitar a pie. Y en épocas de lluvia, muchos vecinos quedan aislados.

El impacto del avance urbano: Obras privadas sin control

La llegada de nuevos emprendimientos inmobiliarios volvió aún más frágil el equilibrio del barrio. Las calles, que nunca recibieron el mantenimiento adecuado, sufren el constante paso de:

• Camiones de gran porte y máquinas de obra.

• Movimientos de suelo extensivos.

• Sin control municipal, las calles de tierra se destruyen en pocas semanas, mientras las reparaciones llegan tarde o directamente no llegan.

• Servicios que no entran y transporte que no puede circular.

A esto se suman varios problemas estructurales:

• El transporte público evita entrar a El Rincón por el estado de las calles.

• Los recorridos se modificaron, el servicio es irregular y en algunos sectores directamente no existe.

• También hay servicios privados (como recolección domiciliaria o reparto) que restringen su ingreso por temor a romper vehículos.

• El barrio queda así doblemente aislado: por tierra y por servicios.

Reclamos que se acumulan y un pedido urgente al Municipio

Los vecinos vienen insistiendo desde hace años:

• Arreglo integral y sostenido de calles.

• Mejoras en los accesos.

• Reapertura de la salida por Calle 446.

• Control al tránsito pesado de obras.

• Plan de mantenimiento real, no intervenciones aisladas.

Un reclamo que vuelve al centro de la agenda

El Rincón se convirtió en uno de los casos más críticos de la Zona Norte de La Plata. Calles destruidas, falta de planificación, crecimiento urbano sin infraestructura y ausencia del Estado forman un combo que afecta la calidad de vida de miles de familias.

Desde NexoNorte seguiremos de cerca la situación y las respuestas que lleguen desde la Municipalidad de La Plata, mientras los vecinos siguen reclamando algo básico: poder entrar y salir de su propio barrio.

El Rincón: El abandono en fotos

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