En la Zona Norte platense los robos están a la orden del día, y ocurren de las formas más diversas, algunas incluso insólitas, como la que sucedió en Joaquín Gorina. Allí, un ladrón atacó un kiosco ubicado en Calle 138 y 485. Aunque sin dudas, lo más llamativo fue que mordió a su víctima para poder cumplir con su tarea.

Todo ocurrió el pasado domingo 19 a las 7 de la mañana. El delincuente logró escapar con dinero en efectivo y bebidas alcohólicas, con la ayuda de un cómplice que lo esperaba en una motocicleta. Según se informó, el ilícito comenzó cuando el maleante se acercó a la ventanilla y le pidió al empleado que le abriera, a lo que este se negó. 

Ante esta primera negativa, el "cliente" pidió un jugo y en el momento que el damnificado se lo iba a entregar, sacó el arma de fuego y comenzó la pesadilla. Fue entonces cuando comenzó el forcejeo entre ambos y para evitar que le saquen la pistola, el implicado no dudó en morder a la víctima, para luego ingresar al comercio tras controlar la escena.

En diálogo con Diario El Día, la madre del joven lesionado destacó: "Ni bien me avisó mi hijo, lo llevé al hospital para que le revisen su mano. Le dieron un punto y además, le dijeron que no le podían dar más por las bacterias que genera una mordedura".

A lo que agregó: "Vivimos con el corazón en la boca en el barrio. Siempre pasa algo y ahora le tocó que le roben a mi hijo por segunda vez, ya que antes de la pandemia le habían sacado el teléfono en 28 y 493, mientras venía de trabajar".

Fuente Diario El Día.