

Desde la redacción de NexoNorte tomamos contacto con una vecina de Villa Castells, identificada como Susana Schuster, que por su cuenta mandó a realizar un análisis fisicoquímico y bacteriológico del servicio de agua corriente en su casa y se llevó una gran sorpresa: no es apta para el consumo humano.
Sobre esta situación, Susana relató: "Ante los comentarios de mis vecinos sobre la potabilidad del agua, decidí hablar con ABSA. La empleada que me atendió me aseguró que en Villa Castells el agua era potable, pero no me conformé con su respuesta y decidí hacer por mi cuenta los respectivos análisis, que me costaron $8.000".
Mientras que también contó: "Se imaginarán mi sorpresa cuando leí los resultados, que aseguraban que la muestra de agua no era ni física, ni bacteriológicamente potable. Ante esta respuesta, mi preocupación aumentó, ya que no hubo ningún método de prevención, ninguna información, y encima cuando les pregunté por teléfono, me lo negaron".
Los contundentes resultados del análisis realizado en forma privada por la frentista de Villa Castells.
Por otro lado, Schuster destacó: "Este hecho es muy grave porque está en juego la salud de la población de Villa Castells. Le envié un mail a la Defensoría del Pueblo, con la esperanza que ayuden a resolver este problema. El agua está contaminada".
Sin dudas, un hecho preocupante que se suma a los reclamos también de otras zonas, como Gonnet, en donde también los vecinos tienen problemas con el servicio de agua corriente e incluso deben diariamente ir en búsqueda de bidones de agua potable a las Delegaciones correspondientes.
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