A tan solo horas del 108 Aniversario de City Bell, desde NexoNorte tuvimos el enorme placer de dialogar con Guillermo Javier Defranco, el autor de dos libros que recorren la historia de la localidad de la Zona Norte. Dos publicaciones inspiradas en su devoción por las calles que lo vieron nacer y desarrollarse tanto personal, como profesionalmente.

Estamos hablando de "City Bell: Crónica de la tierra de uno" (2005) y "Escritos Citybellinos y otros anexos" (2011). Además, Defranco nos compartió su visión sobre la actualidad de la región, y su orgullo por su última publicación ("Mate en Mano") que agotó su primera tirada en la mítica Feria del Libro que se está llevando a cabo en La Rural de Buenos Aires. 

También te contamos todo sobre su próxima actividad presencial, que realizará junto a Juan José Vendramín en el Club Atlético y Fomento City Bell, emplazado en 473 entre Diagonal 3 y 14 C. La cita será el sábado 14 de mayo, a partir de las 19:00, y llevará como nombre "City Bell a la carta". 

Defranco nació en City Bell en 1960 y pertenece a una familia radicada en la misma localidad hace más de setenta años.

Redacción: ¿Cómo y cuándo nació la idea de escribir los libros sobre City Bell? 

Guillermo Defranco: "La primera edición de 'City Bell: Crónica de la tierra de uno', nació en el 2002 cuando dejé de publicar para una revista mensual llamada 'Vereda Bell'. Empecé a tener ese tiempo libre, que antes le dedicaba a la revista. Tenía mucho material sobre City Bell y desde adolescente, junto con un amigo, teníamos la idea de hacer un libro sobre la localidad".

— "Lo charlé con mi familia y puse manos a la obra. No solamente fue ordenar todo el material que yo ya tenía, sino también buscar nuevo material, chequear fuentes, y verificar datos e historias (que algunas no eran correctas). Fueron tres años de laburo con este proceso". 

— "En mis manos pude tener documentación original de la fundación de City Bell, y objetos personales de la familia Bell, que están en poder de descendientes de personas que trabajaron en la Estancia Grande. E inclusive testimonios directos, como el de Lorna Bell, que es nieta de Jorge Bell y que junto con su madre y sus hermanos, fueron los últimos habitantes de la Estancia Grande, antes de que el Estado la expropiara para instalar el Batallón N°2 de comunicaciones". 

— "El libro vino con un predecesor que se lanzó en el año 2000 y se llamó: 'Crónicas Citybellenses', que fue una recopilación de 50 de las 110 crónicas y columnas que yo había publicado en los años '90 y principios de los '00 en el semanario 'City Bell Hechos y Personajes'. Fue una muy buena experiencia con una excelente relación de ida y vuelta con mis lectores". 

Guillermo es periodista, comenzó a ejercer la profesión dirigiendo el mensuario "Comienzos" (1981-1983).

— "Entonces, terminada mi experiencia personal con el semanario e impulsado por el cambio de siglo, lancé 'Crónicas Citybellenses' con una edición muy casera. De hecho las tapas las realicé con mi impresora de chorro de tinta, y los interiores fueron realizados con foto duplicación digital a cargo de los hermanos Vendramín de la Librería Pinocho. Lo mismo del encuadernado con espiral. Hoy es una pieza de colección porque está agotado, habremos hecho 500 ejemplares".

— "Por su parte, 'Escritos Citybellinos' fue una respuesta a aquellos lectores que yo tenía en papel en el semanario y que me perdieron cuando empecé a redactar en Internet, ellos pensaban que ya no escribía más. Era un público mayor de edad. Entonces decidimos seleccionar algunas de las crónicas que venía publicando en 'Citybellinos.com.ar', y sacar el libro en papel".

— "El mismo cuenta con un homenaje solapado en la tapa, en donde puse la foto de la primera casa que se construyó en el pueblo, la de Cantilo y 7, que hoy está irreconocible si le sacamos toda la parafernalia de vidrios y metales que tiene puesta como ampliación. Creo que debería recuperarse como casa original. Me pareció correcto dejar un testimonio de lo que era esa construcción". 

R: ¿Con qué se van a encontrar los vecinos que adquieran los libros?

G.D: "En 'City Bell: Crónica de la tierra de uno', el lector se va a encontrar, no con toda la historia de City Bell ni mucho menos, porque de hecho decidí cortar la investigación hacia la década del '40, que fue cuando desapareció la Estancia Grande, y cuando el Municipio nombró a un Delegado Municipal y dejó de haber un Administrador del pueblo, si bien el puesto lo ocupó la misma persona los primeros años, don Tobías Büchele".

— "Fue un cambio significativo en la dinámica del pueblo, comenzaron a hacerse las obras de infraestructura y servicios públicos. Por ejemplo, en la segunda mitad de la década del '40, se parquizó y se trazó la Plaza Belgrano, que quedó como la principal de City Bell aunque no era esa la idea original".

— "Estas obras, anteriormente las venía llevando a cabo la Sociedad de Fomento de City Bell y a partir de ese momento se empezó a hacer cargo el Municipio, al igual que Obras Sanitarias y la empresa de electricidad estatal. Es decir que la Sociedad Anónima de City Bell dejó de ser la administradora del pueblo".

Defranco también fue columnista y reportero de "El Periódico de City Bell" y de "City Bell-Hechos y Personajes".

— "Los vecinos podrán encontrar en el libro documentación y testimonios vivos, en algunos casos de hasta gente que en su adolescencia llegó a trabajar en la Estancia Grande, al igual que los de Lorna Bell, como contaba anteriormente. Ella falleció unos meses después de que saliera la primera edición del libro, aunque pudo tenerlo en sus manos".

— "Yo mismo se lo entregué, fue una experiencia muy fuerte tener cara a cara a la nieta de Jorge Bell. En el libro también se cuenta el origen de algunas de las instituciones de City Bell, y sus tiempos de gloria. Como los casos del Club Atlético City Bell y el Argentino Juvenil Club, que por los años '50, las dos mitades que constituían la sociedad del pueblo hacía los '60 y '70 se habían originado en sus bailes, a los cuales asistían las más importantes orquestas y músicos del país".

— "Se van a encontrar también con mucho material gráfico y con el relato del acontecimiento que yo considero como el de mayor importancia de City Bell que fue el aterrizaje de emergencia de un avión. Ocurrió en donde hoy está ubicado el Country Club de Estudiantes y el Laboratorio Bagó, con el arroyo de por medio. Fue un 28 de abril de 1938. No fue una tragedia porque el piloto tuvo una gran pericia para aterrizar el avión sobre unos maizales".

— "Los lectores se encontrarán con un texto muy ameno y fácil de leer. Está escrito con todo el afecto que yo tengo por City Bell. Soy nacido y criado allí. Hace 61 años nací en Jorge Bell entre Cantilo y 15, aunque cueste creerlo por la dirección. Es un orgullo para mí ser parte de este pueblo". 

R: ¿Cómo encontrás a City Bell en este nuevo Aniversario? ¿Cómo imaginabas que sería su futuro cuando eras chico?

G.D: "Cuando era chico no me imaginaba ni me planteaba cómo iba a ser City Bell, en realidad suponía que no iba a haber muchos cambios. Sí que se podrían mejorar algunos asfaltos, luces y servicios públicos. Pero no pensaba que íbamos a perder tanto verde, tantos jardínes. Tampoco que se iba a perder la costumbre de los vecinos de salir a tomar aire a la tardecita para conversar con la gente que pasaba".

— "Hoy, un poco por la inseguridad y otro poco porque muchos han construido paredones y locales comerciales en los frentes de sus casas, City Bell dejó de ser una sociedad de puertas y jardínes abiertos, para convertirse en una sociedad cerrada hacia adentro. Por allí está pasando la pérdida de identidad que estamos sufriendo en el pueblo, más allá de la pérdida de patrimonio histórico".

En 2010 fue distinguido como "Personalidad Destacada" de la comunidad de City Bell, por su trayectoria en el periodismo local.

— "Creo que estamos a tiempo de volver a incentivar las relaciones entre los vecinos. Volver a saludarnos y saber quién vive al lado y de qué se ocupa, de llevarle comida si estuvimos cocinando con la familia. Gestos que antes existían en una sociedad que claro, era más chica. Ahora estamos en el orden de los 100.000 habitantes. Me gustaría que se preserve nuestra historia, identidad y los espacios verdes, para no perder la tranquilidad".

 
R: ¿De qué forma se pueden adquirir los libros? ¿Qué otros proyectos y actividades tenés en mente?

G. D: "Hay un quinto libro, que ya está cumpliendo un año, llamado 'Mate en mano', que no es exclusivamente sobre City Bell. Está pensado para acercar a la gente al mate, más allá de la cuestión histórica de cómo prepararlo y cómo se produce la yerba. Se resalta su aspecto afectivo, les puedo asegurar que una calabaza vacía está llena de historias. Estas sensaciones trató de transmitir a través de las 150 páginas del libro".

— "Uno de mis vendedores está en la Feria del Libro y me confirmó que se agotó el stock disponible. Tuvimos que reponer, lo que es un orgullo y una emoción tremenda. Mis libros se pueden adquirir a través de mi correo electrónico [email protected]; también de mi Instagram que es @guiyedefranco; y de las páginas de Facebook 'Citybellinos', 'City Bell: Crónica de la tierra de uno', y 'Guillermo Javier Defranco', que es la mía personal".

— "En cuanto a mis actividades, el próximo sábado 14 de mayo, a partir de las 19:00, estaremos con Juan José Vendramín en el Club Atlético City Bell, con 'City Bell a la carta'. Vamos a proponer cinco o seis temas cada uno para que la gente elija como si fuera un plato en un restaurante. Los elegidos los desarrollaremos y compartiremos también fotografías y documentación". 

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