

En la entrega N°14 de extractos del libro "City Bell: Vecinos que cuentan historias", les compartimos el texto "Había una vez un colegio", publicado por Inés Álvarez. En el texto, la autora nos cuenta los detalles de cómo junto a otras cuatro colegas le dieron vida al primer colegio privado de la localidad: el Instituto José Manuel Estrada.
Durante el verano de 1955, alquilamos una casa con teléfono en el centro de City Bell, para preparar alumnos. Éramos un grupo de maestras que habíamos quedado cesantes cuando surgió el problema de Perón con la Iglesia.
En marzo de 1956 fuimos a la Dirección de Escuelas a preguntar sobre los requisitos para instalar una Academia de Apoyo Escolar, entonces, una providencial señora de apellido Luna, nos dijo: "Para Academia, no necesitan nada, pero ¿por qué no ponen un colegio?".
En ese momento no había ningún colegio privado en City Bell, entonces nos decidimos a instalarlo. Yo, Inés Álvarez, era la mayor del grupo, con 25 años, Emilia "Mimí" Castro y Celina "Chelita" Fernández, tenían 24.
La casa que habíamos alquilado, quedaba en Cantilo entre Jorge Bell y 5 (actualmente Calle 473 entre Diagonal 3 y 14), que para entonces estaba asfaltada y poblada. Tenía living, tres dormitorios, garaje y 60 metros de fondo. Ese año de 1956, las clases comenzaron el 14 de mayo debido a la epidemia de poliomielitis, entonces teníamos que acondicionar la casa rápidamente.
Llevamos una mesa y sillas de mi casa, todo se improvisaba, y debíamos pedir ayuda a los parientes para trasladar los muebles. Encargamos a una carpintería, ubicada en la Calle 7 y 80 de La Plata, seis mesas rectangulares con sus respectivas sillas.
Para el Jardín de Infantes, adquirimos tres mesas redondas pintadas de celeste, con seis sillitas para cada una. Los pizarrones los compramos en la carpintería de Cerasa, ubicada frente al colegio.
Hacía falta una campana; una de las maestras, "Chichín" Bonfiglio, consiguió una que había pertenecido a la yegua madrina del campo de un pariente, también aportó una vieja victrola, para escuchar el Himno Nacional.
El Colegio comenzó sus actividades, con el nombre de Instituto José Manuel Estrada. Tenía dos salas de Jardín de Infantes, a cargo de Susana D ́Elía en el turno tarde y de Haydeé Bonfiglio en el turno mañana.
La Escuela Primaria, comenzó a funcionar con los siguientes grados: Primer grado, a cargo de la Señorita Inés Álvarez (con 12 alumnos). Segundo grado, a cargo de la Señorita Celina Fernández. Tercer grado, a cargo de la Señorita Emilia Castro. En total, fueron 35 aquellos primeros alumnos.
Los niños venían a gusto, nadie lloraba, porque aquello se parecía más a una casa que a un colegio. Las primeras familias que enviaron a sus hijos a la escuela, fueron las de Cerasa, Bertomeu, Randazzo, Silva, Chambó y Vendramín, entre otras.
Posteriormente se habilitaron: Cuarto grado a cargo de la Señorita Gisela Salvi, Quinto grado a cargo de la Señorita Nilda Robiani, y Sexto grado a cargo de la Señorita Violeta Antonietti. La Dirección del colegio estaba a cargo de Emilia Castro.
La primera promoción de Primaria egresó en 1962 y en 1966 comenzó a funcionar la Escuela Secundaria, pero eso lo contaré otro día...
El primer colegio privado de City Bell fue fundado el 14 de mayo de 1956. Sobre su historia, los colegas de City Bell Viva explican: "En cierto modo, supo interpretar el deseo de muchos por asistir a un colegio que brindara una educación de tipo religiosa".
Mientras que también sumaron: "Si bien la idea brotó de Emilia Castro, Inés Álvarez y Celina Fernández, ésta se plasmó en la realidad asociándose como fundadoras las docentes Susana D'Elía y Haydé Bonfiglio".
Como reza el texto compartido por Álvarez, el Estrada dio comienzo a sus actividades con dos salitas de Jardín (una por turno) y los tres primeros grados del nivel Primario, con un total de 35 alumnos.
Recién para 1966 se incorporó el nivel Secundario en dos modalidades: Ciclo Básico y Bachiller Mercantil. Vale destacar que desde 1991, la Fundación José Manuel Estrada es la encargada de continuar con la obra emprendida por las cinco visionarias maestras.
• Pautas para ser parte de la segunda entrega de "City Bell: Vecinos que cuentan historias".
• Lectura online y descarga de la primera entrega de "City Bell: Vecinos que cuentan historias".
• Para adquirir el ejemplar físico de la primera entrega, los interesados deberán acercarse a la sede del Club Atlético y Fomento City Bell, ubicada en Calle 473 entre 13 C y Diagonal 3.
• "La vuelta al mundo en una manzana": Así era City Bell hace 60 años.
• "El Jardín 911 y su gente": Una institución modelo en City Bell que va por sus 60 años.
• "Algo sobre el Colegio Fray Mamerto Esquiú": ¿Cómo era City Bell y su enseñanza hace 60 años?
• "El Savoia en los ochenta": Primeros amigos, travesuras y una infancia inolvidable en City Bell.
• ¿Sabías que City Bell tuvo su propio cine? Amanecer y ocaso de un sueño compartido.
• ¿Quién fue Roberto Themis Speroni y cuál es su vínculo con City Bell?
• La Casa Azul de Jorge Romero Brest: Un tesoro artístico que perdura en City Bell.
• Dueño de una pluma brillante: ¿Quién es "El Hombre Olvidado" de City Bell?
• Sus obras son tesoros en museos del país: Enrique Riccio y su lazo indeleble con City Bell.
• El mayor acontecimiento en la historia de City Bell: La noche en que se cayó la luna.
• Fútbol de época en City Bell: ¿Quiénes jugaron en La Canchita del Negro Joya?
• ¿Cuál es la familia que vivió en la primera casa de City Bell y dónde estaba ubicada?
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